No es tiempo para un desvelado

Son las 5:00 de la madrugada y me he desvelado, solo por el simple hecho de pensar, de no parar de darle vueltas y más vueltas a muchos asuntos, laborales, políticos, de la vida, vueltas que me hace no dormir. Nunca he sido de esos que se desvelaran fácilmente, ya que el sueño más que una obligación, es una verdadera necesidad, que el ser humano necesita, algunos más que otros y otros más que unos, en definitiva dormir bien es un buen signo de rendimiento extra en tu vida normal. Pero no quiero ir por ahí.
Me he desvelado porque algo me preocupa, sin duda es cierto, son tantas cosas aquellas que me preocupan, que no sabría expresarlas todas con el mayor acierto, sin hacer daño o mejor dicho sin hacerme daño, pero el hecho está, en que esta noche lo que de verdad me ha hecho desvelarme, es la necesidad y mi relación como político, como le decía hace unas horas a una compañera, “tengo más problemas de la puerta del Ayuntamiento para fuera, que de la puerta del Ayuntamiento para dentro”, completamente real, pero hoy me ha hecho desvelarme lo que le preocupa a muchos vecinos y amigos, como podemos salir de la crisis. Como volver a navegar por la senda del crecimiento económico y que medidas son necesarias e imprescindibles para la creación de empleo, eso hoy, es lo que me ha puesto con los ojos como platos a las cinco de la madrugada.
Cuando uno se mete en política no es para ser la marioneta vestida de traje azul, corbata roja y camisa planchada, que marcha en la procesión con la risa marcada y la mano siempre dispuesta al saludo cordial, incluso sin conocer al vecino. Sino para ser consciente de que tus decisiones afectan, y de qué manera, a personas, somos políticos para demostrar que tenemos la grandeza de tomar buenas y contundentes decisiones, y ahora más que nunca, con el fin del progreso y el despegue de nuestro Ayuntamiento. Las decisiones políticas nunca son a gusto del consumidor, pero siempre deben tener un claro factor diferenciador con aquellos que toman otras decisiones del ámbito laboral, comercial, patronal, somos políticos y debemos de actuar siempre con la cabeza puesta en el bien de nuestros ciudadanos, marcando claramente, los grandes perjuicios y valorando aquellas cuestiones que de verdad afectan a personas, nunca una decisión política debe ni puede ser totalmente contraria y arbitraria a la mayoría. Muchos pensaran el porqué de estas palabras, solo puedo contestar que hoy soy consciente de que la política ha cambiado y como tal, el político también y es por eso que hoy más que nunca somos y tenemos la obligación de estar a la altura que nos piden nuestros ciudadanos, políticos de grandes alturas de miras.
Me desvela la política, si, porque sigo creyendo en ella, pero me desvela más saber que, la política es cuestión al final de capacidad y de toma de decisión, pero me reconforta el simple hecho de saber, que todavía existen políticos capaces de desvelarse porque creen en ella y en su futuro